El séptimo chakra: corona – Sahasrara

Llegamos al último de los siete chakras: el de la corona. Ubicado en la parte superior de nuestra cabeza, a un par de centímetros por encima de ésta, es de color violeta y a veces, blanco. Toma el color blanco cuando todos nuestros chakras se encuentran activos y balanceados, dando pie a que nuestro espíritu se encuentre radiante y nuestra conciencia iluminada. A los grandes personajes espirituales se les ilustra con una aureola en la cabeza, la cual hace referencia al séptimo chakra completamente activo y radiante.

Físicamente, toma la forma de la glándula pituitaria: la glándula maestra del cuerpo, la cual produce hormonas que afectan el crecimiento y a todo el cuerpo. Este chakra es nuestra conexión con el universo y lo divino, así como el primero es el puente que nos une con el plano físico. La verdadera esencia de nuestro ser yace en el séptimo chakra. Su elemento es el pensamiento. Una vez que nuestra conciencia ha echado raíces y ha crecido a lo largo de nuestra columna y de los elementos que rigen esta realidad, puede abrirse y experimentarse a sí misma sin las ataduras del plano físico.

La función de este chakra es experimentar la realidad, la cual nosotros co-creamos junto con el universo todo el tiempo, a partir de nuestros pensamientos. Cuando hemos llegado a este punto en la expansión de nuestra conciencia, tenemos completa claridad acerca del rol que nuestros pensamientos juegan en nuestra vida. Todo lo que nos pasa son lecciones para aprender alguna lección que nos es de suma importancia en el desarrollo de nuestro ser. Algunas personas afirman que el séptimo chakra es el punto por el cual nuestra conciencia o alma entra en el cuerpo y permite la vida.

En el chakra de la corona nos encontramos energéticamente alejados del mundo material, abarcado por los chakras inferiores, y entramos en un lugar donde el espacio y el tiempo quedan trascendidos. La conciencia es infinita, no tiene principio ni fin, ya que cada uno de nosotros –que somos puntos de conciencia– somos parte de toda la creación. El entendimiento de la naturaleza infinita del ser es una de las verdades que se vuelven obvias cuando hemos llegado a la cima del sistema de chakras.

Hay quienes le llaman “El Testigo Silencioso” a esta parte de nosotros, la cual observa los pensamientos que tiene la mente y las acciones realizadas por el cuerpo, sin embargo, cuando no hemos llegado a este punto de la evolución, podemos llegar a perdernos en los pensamientos y en el mundo físico. Los cuales, a pesar de ser parte de la experiencia humana, no definen en absoluto nuestra verdadera naturaleza, y cuando no nos detenemos a reflexionar acerca de esto, es cuando este chakra puede verse afectado y traer serios problemas con ello.

Consecuencias de que Sahasrara esté bloqueado

Las afectaciones de esta chakra son, por mucho, más intensas que las de los demás. Manifestaciones físicas de un bloqueo en el séptimo chakra incluyen enfermedades como el cáncer, que hacen que la vida de la persona que sufre esta enfermedad se detenga por completo y haga un alto total a re-evaluar todo. La depresión, apatía, y simplemente el desinterés por vivir son las consecuencias psicológicas de un chakra corona disfuncional. Muchos de los bloqueos que dañan este chakra vienen de nuestro sistema de creencias.

Te recomiendo que leas la publicación que hice acerca de “Las creencias y cómo cambiarlas” para profundizar en este tema. Al sistema de creencias se le puede ver como los lentes que ocupamos todo el tiempo, a través de los cuales vemos e interpretamos la realidad. Cuando tenemos creencias limitantes, estamos literalmente deteniendo a nuestro espíritu y su crecimiento, lo cual puede llegar a reprimirlo en tal nivel que atraigamos a nuestra vida situaciones muy negativas, las cuales serán para intentar ayudarnos en cambiar este sistema de creencias.

Como su elemento es el pensamiento, es por medio de la información que logramos expandir nuestras fronteras mentales y podemos encontrarnos pensando cosas diferentes, nuevas y, a veces, mejores. Si nos cerramos a aprender, a escuchar a los demás y a validar todos los puntos de vista y considerar todas las opiniones, entonces estamos deteniendo el crecimiento de nuestra conciencia y de nuestra mente. Actitudes inflexibles y desinteresadas pueden dañar seriamente al séptimo chakra.

Cuando está desbloqueado y funcional, tenemos la oportunidad de vivir lo más apegados posible en esta vida a nuestro Yo Más Elevado. Éste ser somos nosotros en el futuro muy distante, el cual está proyectándose en esta realidad para tener una experiencia humana y aprender valiosas lecciones. También, seremos capaces de alcanzar la iluminación espiritual, la cual es la máxima expresión de nuestra conciencia, y con ello, podremos vivir plenamente en el momento presente, aceptando y amando todo lo que hay, siendo conscientes de que todos somos uno, y de que todos estamos aquí por la misma razón.

Sin embargo, hay muchas causas por las que puede llegar a bloquearse, siendo la principal la negación de lo divino. Vivir rehusándonos a ver y a aceptar que hay algo que va más allá de nuestra realidad y entendimiento humano, afecta significativamente a este chakra. Esto es hablando de una afectación directa, pero no olvidemos que este chakra, al ser el promedio de todo nuestro sistema de chakras, se ve afectado cuando cualquiera de los otros 6 está bloqueado.

Cómo desbloquear el séptimo chakra

No hay maneras físicas de desbloquear este chakra a diferencia de los demás, ya que se encuentra literalmente fuera de nuestro cuerpo. Al ser de una naturaleza espiritual, la única manera de energizarlo es con acciones espirituales. El silencio y la contemplación es de lo más benéfico para activar el séptimo chakra, ya que de esta manera estamos desconectándonos del plano físico, y podemos empezar a entrar en la realidad espiritual por medio de la reflexión.

La meditación es especialmente útil para el chakra de la corona. Visualizar una luz a un par de centímetros por encima de nuestra cabeza de color violeta, la cual poco a poco se va volviendo más poderosa y empieza a volverse más y más blanca y colorea todo nuestro campo energético es igual de útil. El ayuno consciente, con una intención espiritual, también es muy energizante para el séptimo chakra. Esto nos permite “alimentarnos” de energía universal que entra a nuestro cuerpo a través del chakra de la corona. Hacer acciones desinteresadas por los demás, que fortalezcan este vínculo que todos tenemos con todos, es igual de bueno.

Pero lo que más recomiendo es rendirnos ante nuestra naturaleza espiritual. Creo que todos, en algún momento, llegamos a cuestionar el tema de la espiritualidad. Muchos llegan a la conclusión de que la vida es producto del azar y de que no hay tal cosa como una fuente inteligente de la creación. Otros limitan muchos aspectos de su vida por prácticas religiosas que les dictaminan qué DEBEN hacer con su vida. Es respetable la decisión que cada quién tome, pero en mi opinión, lo que más va a beneficiar a este chakra espiritual es encontrar nuestra manera particular de sentirnos conectados con la fuente de todo y vivir honrándola. La frecuencia apropiada para el séptimo chakra es la de 936HZ (https://www.youtube.com/watch?v=vbyMrfXIYwE).